Con la transformación digital en la industria alimentaria han surgido nuevos competidores, nuevas tecnologías y demandas en el funcionamiento de sus procesos de trabajo. La digitalización del sector ha cambiado la forma en la que la industria lleva a cabo sus procesos, servicios y negocios.
El IoT y la inteligencia artificial están ayudando a las empresas a alcanzar altos niveles de seguridad alimentaria, mejorar la trazabilidad, reducir el desperdicio y reducir los costes y riesgos en las diversas etapas del procesamiento y envasado de alimentos.
El principal objetivo de la Industria alimentaria es suministrar alimentos higiénicos y de alta calidad al consumidor final. La calidad y la higiene de los alimentos y bebidas dependen de cómo se conservan los alimentos y bebidas antes de que lleguen al recipiente del consumidor. Al almacenar productos putrescibles como productos lácteos, carne, etc., necesitamos mantener la temperatura y la humedad suficientes.
Los datos son el ingrediente clave para navegar rápidamente y lograr la excelencia operativa
La automatización y su papel fundamental en la transformación digital de la Industria Alimentaria
Mediante la implantación de nuevas tecnologías, se consigue una gestión óptima de los procesos productivos, logrando que estos sean más seguros, de mayor calidad y en menos tiempo. Entre los beneficios obtenidos en la industria alimentaria mediante la implantación de soluciones tecnológicas podemos destacar:
- Mejora de la eficiencia de los procesos: Reducción del OPEX y del consumo de energía, mediante el análisis y predicción de consumos energéticos.
- Incremento de la producción a menores costes y reducciones en el consumo energético.
- Mejora de la trazabilidad y visibilidad de cada uno de los trabajos realizados en la planta de fabricación.
- Reducción de la huella de carbono.
- Reducción en tiempos de parada y detección temprana de fallos y agilidad ante posibles correcciones.
- Disponibilidad de datos en tiempo real de los indicadores claves del proceso de fabricación.
- Visión global de pérdidas de eficiencia durante el proceso de fabricación.
- Mejora de la precisión de tareas para evitar errores humanos y conseguir optimizar recursos.
- Mejorar la disponibilidad de planta, comparando el rendimiento entre diferentes plantas, procesos, maquinas…
- Control total de la calidad de la producción industrial. Control exhausto de la climatología, temperatura, humedad…
- Activación de alarmas y notificaciones.
- Agilizar la toma de decisiones en materia de eficiencia energética.
- Optimización de tiempos de resolución con un mantenimiento preventivo y correctivo.
La automatización de los procesos en planta y la implantación de sistemas de producción inteligentes y eficientes aportan grandes beneficios en la industria alimentaria, permiten en gran medida aprovechar mejor sus recursos, minimizar posibles errores de fabricación y lograr un importante ahorro en costes.
CIC cuenta con los recursos y la experiencia en desarrollo software para ayudar a los diferentes actores del sector alimentario en su camino hacia una trasformación digital eficaz y segura.